sábado, 31 de marzo de 2012

Ejemplo de vida, envidiable amor

Y así te fui queriendo a diario
sin una ley, sin un horario
y así me fuiste despertando
de cada sueño donde estabas tu.





Un homenaje para esta pareja singular, a quien el mismísimo amor estaría rendida a sus pies por los años pasados juntos. Con cariño al tío amoroso y al abuelo querendón.
Ave y Elena los quiero mucho!